Ingeniero de Telecomunicaciones, fundador de una docena de empresas, entre ellas Jazztel o DigiMobil, José Manuel Arnaiz es también, a sus 62 años, un emprendedor. Y lo demuestra con su nuevo proyecto: SeaCoast, un emprendimiento para navegantes. Todo comenzó en 2019, cuando lanzó la idea de ShoreView, una aplicación de realidad aumentada para asistir al navegante con información proporcionada por la comunidad. Después de tres años de desarrollo tecnológico, en 2022 el proyecto recibió una subvención de Puertos del Estado de 314.000 euros y comenzó a ofrecer avisos meteorológicos y contenidos en tiempo real.
Cómo aplicar el blockchain al ocio en la costa
Fruto de toda experiencia, y con el objetivo de ampliar los contenidos y la contribución de los usuarios, nace SeaCoast. Una plataforma de ocio en el mar que tiene como misión “digitalizar la creación, intercambio y comercialización de contenidos, herramientas y recursos sobre el mundo de la costa y el mar, incentivando la participación de los usuarios mediante recompensas y ventajas asociadas al uso de tokens”. La ventaja del sistema ‘blockchain’, explica Arnaiz, es que las transacciones son descentralizadas (no hay un punto que las coordine), auditables, abiertas (cualquiera puede verlas) y anónimas.
El emprendimiento para navegantes, que está en fase de captación de fondos, reúne todo tipo de contenidos vinculados al ocio en la costa, como vídeos, fotografías, recorridos, rutas de navegación, reservas en restaurantes, en clubs de buceo o alertas meteorológicas. “Con los tokens lo que hacemos es premiar a aquellos usuarios que están depositando en esta plataforma de ocio contenidos de calidad, que sean útiles, relevantes y que además estén bien georeferenciados”, comenta Arnaiz en un nuevo Martes del Emprendimiento, patrocinado por Iberdrola.
Según cuenta, la tecnología blockchain todavía está en una fase muy inicial de penetración en los hábitos de consumo de la sociedad. “Yo lo comparo con la época que me tocó vivir de Internet a finales de los 90. En el 98, por ejemplo, que empezaba a haber ‘e-commerce’, la gente no quería poner su tarjeta de crédito ahí, y decía: ‘a ver qué van a hacer con ella. Yo creo que estamos en ese momento, solo que esta disrupción podría ser más profunda que Internet”, señala Arnaiz. En su opinión, SeaCoast puede contribuir a acercar esta nueva tecnología al usuario medio, más allá de las criptomonedas: “Con aplicaciones como esta vamos a conseguir aterrizar mucho más el sistema blockchain a la gente, porque creo que hay desconfianza. Y eso es también una barrera”.
[/vc_column_text]