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El día 19 de noviembre celebramos el Día Internacional de las Mujeres Emprendedoras, reivindicando, de esta manera, el emprendimiento femenino como una de las claves del crecimiento empresarial.
Hoy en día y de forma más concreta en España, todavía el emprendimiento femenino dista mucho de alcanzar el número de emprendedores hombres y, sin ánimo de buscar ángeles ni demonios, al final la cuestión, sin menoscabar otros temas también muy importantes, podría reducirse a dos puntos fundamentales: la cultura y la conciliación.
En relación a la cultura, cabría destacar el estudio realizado por GEM Global que señala que aunque la tasa de emprendimiento en mujeres ha aumentado en los últimos años, las mujeres emprendemos más por necesidad que por oportunidad, es decir, las mujeres emprendemos, generalmente, ante la falta de empleo o de una mejora profesional real, lo que acerca a nuestro emprendimiento a una fragilidad asociada a un proyecto que no ha identificado de forma previa un hueco en el mercado, si no que se convierte en la única alternativa para poder continuar.
En esta misma línea, GEM Global señala el hecho de que las mujeres accedamos con menos frecuencia que los hombres a carreras tecnológicas o de ingeniera como uno de los motivos, si bien es cierto que en nuestro país las mujeres con estudios universitarios son muy superior a la media europea.
En referencia a la conciliación no podemos pasar por alto que la compañía Salesforce publicaba recientemente en un informe que las emprendedoras españolas tienen en su mayoría entre 25 y 35 años y son, en muchos casos, madres.
En este sentido, no se puede obviar qué la maternidad tiene su propio horario, un horario que no siempre es compatible con una agenda que sigue llevando su propio ritmo y que no entiende de noches sin dormir o de biberones a deshora y que, aunque la tecnología ha supuesto un paso adelante, todavía nos queda mucho camino que recorrer.
En todo caso lo importante, es que ya hemos empezado. Hemos comenzado no solo a emprender, también hemos comenzado a verle las ventajas al emprendimiento. Crecemos en este mundo y lo hacemos de la mano de la seguridad que nos otorga ver cómo cada día se realizan más avances sociales que nos empoderan, siendo clave la formación.
Nos lanzamos al emprendimiento y programas como los que ofrece el IEAvanzado nos ayudan a continuar con la certeza de que el éxito está esperándonos a la vuelta de la esquina.
Comenzamos el 15 de enero con la ilusión propia de quién sabe que se puede llegar, porque ya hemos llenado nuestro depósito de ilusión, ganas y mucha fuerza.
