Auxers, un proyecto gestado por David Ros y David Ramírez, no solo se centra en ofrecer servicios profesionales a pymes y startups, sino que lleva consigo una misión más importante: fortalecer y potenciar el ecosistema emprendedor. En una nueva edición del Martes del Emprendimiento, patrocinado por Iberdrola y dirigido por Wilfredo Jurado CEO del Instituto de Emprendimiento Avanzado, David Ros explicó cómo Auxers brinda esos “servicios adyacentes” cruciales para el funcionamiento eficiente de un negocio, como es tramitar fondos europeos. El nombre, derivado de Auxo, la diosa griega del crecimiento, refleja la esencia de la empresa: fomentar el desarrollo de las personas y los negocios.
Más Cerca del Cliente, Más Valor Añadido
David Ros destacó la realidad del emprendedor, un “hombre orquesta” que, al lanzarse a crear su empresa, se enfrenta a desafíos multifacéticos. Auxers entra en juego como un aliado estratégico, proporcionando servicios en áreas clave como fiscalidad, financiación, marca, digitalización y recursos humanos. Más que un mero gestor de subvenciones, Auxers busca construir relaciones a largo plazo, ofreciendo un enfoque integral para fortalecer el tejido empresarial. Una ayuda imprescindible para el emprendedor que, subraya, “no tiene por qué saber de todo”. Para eso es por lo que necesita servicios como los que ofrece este emprendimiento.
Además, defiende la figura del empresario como líder y no solo como gestor financiero, subrayando que el verdadero emprendedor lidera y suma al equipo para alcanzar metas conjuntas. Un líder no puede “dar las malas noticias a sus compañeros” sino que tiene que “aguantar mentalmente la presión y la motivación y aportar por sí mismo”.
Los dos socios dejaron sus prometedoras carreras en empresas multinacionales y la seguridad de un buen sueldo a final de mes para volcarse en este proyecto que les permite “hacer lo mismo que hacíamos, ganando menos dinero, pero estando más cerca del cliente para formar parte de su proyecto. Es un trabajo más cercano”. En Auxers son expertos en la gestión y tramitar fondos europeos. “Te ayudamos a construir el proyecto que te da la subvención, gestionarlo y conseguir la subvención. Nosotros lo que queremos es construir relaciones a largo plazo”.
Auxers reconoce que el camino del emprendimiento no es fácil; el retorno no es inmediato, aunque el esfuerzo lo sea. Este aspecto se enfatiza en la gestión de ayudas y fondos europeos, donde, aunque aboga por una administración menos restrictiva, David Ros destaca que el emprendedor debe poner de su parte y asumir la realidad de que no todo puede financiarse.
A pesar de los desafíos, se mantiene optimista sobre el emprendimiento, especialmente al ver la creatividad y la búsqueda de libertad en las nuevas generaciones, solo tienen que encontrar el camino para monetizar sus ideas. Las nuevas generaciones “no quieren ser esclavos, quieren ser sus propios jefes y hacer las cosas a su aire. Son más despegados que las generaciones anteriores, que solo pensaban en un trabajo por cuenta ajena o en ser funcionario. No tienen places para formar una familia y tener hijos, que es uno de los factores que nos empujaba a buscar la estabilidad laboral”.
Formación transversal
En este sentido, ha aplaudido el papel crucial del Instituto de Emprendimiento Avanzado para ofrecer una formación transversal muy necesaria para los emprendedores. “Hay una primera fase en la que el emprendedor tiene que valerse por sí mismo y, en ese momento, la formación es fundamental”. Pero, al tiempo, recuerda que no todos los centros o todos los aprendizajes son iguales: “es cierto que hoy en día puedes encontrar recursos gratis, pero nadie te garantiza que la formación sea de calidad y la de aquí lo es”.
Entre los consejos que dio para los nuevos emprendedores destacó que se lancen “solo si están 100% convencidos” de que su idea puede funcionar. Tampoco hay que desesperar si no funciona en un primer momento: “nosotros teníamos claro que la idea podía no funcionar, pero también nos propusimos trabajar todo lo necesario para que funcionara”. Los inicios, concluye, “son duros. Trabajas más y ganas menos de lo que ganabas por cuenta ajena, pero es más divertido“.
